jueves, 14 de abril de 2016

Europa ya tiene su ley mordaza

Un secreto comercial es “una información que reúne todos los requisitos siguientes: a) es secreta en el sentido de que no es, en su conjunto o en la configuración de cada uno de sus componentes, generalmente conocida o fácilmente accesible a personas del ámbito que normalmente se relaciona con este tipo de información; b) tiene valor comercial porque es secreta …” (*)

¿Les parece una definición suficientemente precisa? No mucho, ¿verdad? Pues es la que contiene la Directiva de Secretos Comerciales que ayer fue aprobada por el Parlamento Europeo por 503 votos a favor, 131 en contra y 18 abstenciones; como es habitual populares y socialistas han votado en la misma dirección. La norma deberá ser ratificada por los 28 estados miembros de la UE que tendrán dos años para incorporarla a sus respectivas legislaciones.

El objetivo declarado es “la protección del saber hacer y la información empresarial no divulgada” y busca, por tanto, evitar el robo de información confidencial. Se entiende (dicen quienes defienden la bondad del texto aprobado) que se trataría de datos relacionados con la innovación, la producción de bienes y servicios y su comercialización, etc. Pero, hay quien se pregunta si, siendo tan genérica la definición de secreto comercial, hubiera sido posible por ejemplo que salieran a la luz los Panamá Papers; en definitiva, si esto abre la veda a la caza del periodista de investigación.

Esto último es lo que piensan casi 50 organizaciones relacionadas con la protección del derecho a la información que llevan tiempo batallando contra esta iniciativa legislativa europea; sin éxito como se ve. La Federación de Sindicatos de Periodistas ha calificado la norma como “atentado europeo contra la información”.

Pablo Mayo, en su crónica de hoy mismo en el periódico El Español especula con la siguiente posibilidad: “Este miércoles la Eurocámara decidió apoyar la renovación por 15 años la licencia del glifosato, el herbicida más utilizado en el globo. Mientras que la Organización Mundial de la Salud sostiene que la sustancia probablemente es cancerígena, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) defiende lo contrario. Pero Corporate Europe Observatory, una organización pro-transparencia, asegura que la UE se negó a proporcionarle los estudios sobre los que basa su evaluación del glifosato argumentando que eso violaría secretos comerciales”
La Directiva, como se ha explicado, tiene que recorrer aún camino hasta su aplicación práctica, pero tomamos la debida nota…porque parece que pintan bastos.



 

(*) For the purposes of this Directive, the following definitions shall apply: 

 ‘trade secret’ means information which meets all of the following requirements: 

(a) is secret in the sense that it is not, as a body or in the precise configuration and assembly of its components, generally known among or readily accessible to persons within the circles that normally deal with the kind of information in question; 

(b) has commercial value because it is secret;  

(c) has been subject to reasonable steps under the circumstances, by the person lawfully in control of the information, to keep it secret; 

‘trade secret holder’ means any natural or legal person lawfully controlling a trade secret; 

‘infringer’ means any natural or legal person who has unlawfully acquired, used or disclosed trade secrets; 

‘infringing goods’ means goods whose design [in fr "conception"], characteristics, functioning, manufacturing process or marketing significantly benefits from trade secrets unlawfully acquired, used or disclosed.