jueves, 23 de octubre de 2014

¡Que peste!

Tengo una duda: ¿cuándo podemos decir que un sistema está corrompido? ¿cuándo se podría decir que uno vive encima de un montón de mierda? Lo digo porque tal vez solo cuando concluyamos que esas afirmaciones son rigurosamente ciertas, en dimensión e intensidad, podremos empezar a pensar en soluciones parejas… en dimensión e intensidad.
Uno se dispone cada día a ponerse al corriente de la marcha de lo público y lo que consigue, lea lo que lea, mire donde mire, escuche lo que escuche,  es percibir el insoportable hedor de la corrupción o la miseria moral.
Sí, los mecanismos que toda democracia (sistema imperfecto y, por tanto, imperfectos esos mecanismos en todo caso) se da para luchar contra estas cosas funciona a toda máquina; y esa es una buena noticia. Pero la podredumbre y la miseria moral parecen llevar una delantera insuperable. Un corrupto ingresa en prisión pero, al tiempo, aparecen muchos más como la setas en este raro mes de octubre; un servidor de lo que es común expresa un propósito razonable y, simultáneamente, diez insultan nuestra inteligencia con una ocurrencia banal o una sinvergonzonería.
Que cansado es todo esto. Que estúpido. No es ya que uno alcance la convicción de que muchas cosas en las que creyó o quiso creer eran mentira o se han convertido en una maloliente falsedad o decepción; es que tanto tufo envejece…a pasos agigantados y no solo a la gente, también a los países.

martes, 21 de octubre de 2014

Pudimos…y ahora, quizás Podemos.

Las encuestas son encuestas y la única que vale es la de las urnas. Pues sí. Por más que eso sea algo que suele repetir quien no se ve favorecido por las encuestas, pues sí, es así. De manera que no tengo mucho interés en debatir a propósito de un dato incontestable: que los sondeos registran un ascenso imparable de Podemos. Ya se verá que significa a efectos prácticos.
 
Desde hoy y hasta el día 26 de este mes, la gente puede votar las 40 propuestas que se han presentado bajo los epígrafes de documento ético, documento político y documento organizativo. No son solo dos como machaconamente repite casi toda la prensa. Son tres los grupos promotores que presentan los tres tipos de propuestas: Círculo Enfermeras, Claro que podemos (Pablo Iglesias, Monedero, Errejón, etc) y Juristas Madrid; el de Pablo Echenique, Teresa Rodríguez, etc, para la mayoría de la prensa el segundo en discordia como si todo lo demás no existiera, que solo ha entregado el documento organizativo. Si usted quiere votar, basta que se inscriba en la plataforma habilitada al efecto, lea los documentos y ejerza lo que nuestra Constitución consagra como un derecho individual; para entendernos, no funciona como un partido político tradicional: no hay censos, no hay cuotas, no hay carnets.
No estamos acostumbrados a esta forma de funcionar. Más aún, no estamos acostumbrados a fenómenos como Podemos, y mira que, como dice la letra de “A cántaros” (la canción de Pablo Guerrero curiosamente rediviva en estos días) “…pero tú y yo sabemos que hay señales que anuncian que la siesta se acaba…” señales… desde hace tiempo, al menos desde el 15 de mayo de 2011.
Tal vez por eso asistimos a escenificaciones ridículas que más parecen el exponente de la impotencia, como ese empeño de ciertos personajes de la política y el periodismo más bien bufos en pedir cada vez que un dirigente de Podemos se pone a tiro que repita letanías del tipo “Los de ETA son terroristas” o “Venezuela es una dictadura” -que no lo es, como sabe cualquiera, por cierto- que reconozca que proponen el impago de la deuda -da igual que nunca lo hayan dicho; da igual que nadie presente documento alguno en el que conste algo que no sea, desde el principio, la defensa de una auditoria y una reordenación de la deuda- o esa reciente estrategia, que parece sacada de un manual orgánico más bien cutre y que consiste en preguntar de nuevo a quien se ponga a tiro sin Podemos es de izquierdas o de derechas.
Sobre esto último, en efecto, los portavoces más conocidos de Podemos insisten en que no están en esa dinámica: quieren “ocupar la centralidad”, dicen. Y eso es algo que se entiende bien desde el punto de vista de la estrategia: saben de dónde vienen los apoyos y saben que la procedencia es diversa. El PSOE dice que es un partido de izquierdas que quiere ocupar el centro y el PP asegura que es un partido de centro; el resto, cada cual tiene su karma, egocéntrico si se me permite la broma.
Pero si vamos a los principios, pueden leerse los documentos políticos que se votan esta semana si se prefiere estar informado para formar criterio mejor que repetir como papagayos lo que otros dicen; o se pueden tomar en consideración, a modo de resumen, las cinco resoluciones ya aprobadas: auditoria y reestructuración de la deuda que, por ejemplo "determine el grado de corresponsabilidad de los gobernantes y acreedores"; sanidad pública para todos que, por ejemplo, contemple “la eliminación de los copagos, la derogación de las leyes de gestión del Sistema Nacional de Salud (SNS) y de ordenación sanitarias de las comunidades autónomas que posibilita la gestión privada de los recursos sanitarios, el desarrollo de un plan que redefina los objetivos de salud y permita la reformulación de la Ley General de Sanidad (1986)”; defender la educación pública, nuestro derecho y no su negocio que, por ejemplo, presupone “ la paralización y derogación de la LOMCE…”; medidas urgentes de anticorrupción que, por ejemplo, pide “se eliminen las tasas judiciales, el aumento de las penas por delitos de cohecho, tráfico de influencias, malversación y fraude, la tipificación penal de la financiación ilegal de los partidos políticos…” y ganar el derecho a la vivienda y acabar con la impunidad financiera que, entre otras medidas propuestas, implica “el derecho a la dación en pago con carácter retroactivo… reconocer el derecho al alquiler social…”
¿Son de izquierdas o son de derechas? No sé a ustedes, pero a mi me parece que no son medidas neoliberales y que igual si la socialdemocracia no ha perdido la memoria, podría suscribir sin mayor dificultad.  
Y, por cierto, hablando de la memoria: no diré nada de la derecha política o ideológica (suponiendo que esto último exista) porque no tiene. Pero en cuanto al PSOE, me parece a mi que debería ir dejando de lado ese papel de doncella ofendida y la repetición machacona raca,raca de unos cuantos lugares comunes que ya son ineficaces como discurso general; no, la gente sensata, no hemos perdido la cabeza; recordamos y reconocemos los méritos y deméritos, más aún sabemos algo de historia, de España y de Europa; sabemos muy bien quienes están hoy legitimados por la urnas y quienes aún no; no es necesario que se pongan didácticos con nosotros desde esa especie de autoridad moral que, reconocerán conmigo, está un poquito debilitada.
En estos días se celebra aniversario de Suresnes. La historia se escribe a saltos, no es un relato lineal: aquel grupo de jóvenes (tenían la edad que hoy tienen los dirigentes de Podemos) desfenestró a unos dinosaurios -con el política e intelectualmente muy mediocre Llopis a la cabeza- de un partido que apestaba a naftalina,  casi había olvidado en un busto polvoriento a aquel marxista insigne que fue el otro Iglesias y no se enteraba de lo que se cocía en Europa desde hacía tiempo. Por abreviar: luego vino la ilusión del 78 y la  nefasta Tercera Vía de Blair y Guidens. Y ahora, esto.
Es que de todo ha habido en la viña del Señor. Un eslogan de hace años decía que “todo está en los libros” Sí, así es: todo...y también en las hemerotecas.

 

viernes, 17 de octubre de 2014

Calendario Podemos

Desde ayer, día 16, Podemos tiene en marcha un proceso inédito. Han puesto a disposición de la gente una plataforma informática (http://podemos.info/)  en la que quien lo desee puede votar las 365 propuestas que han sido previamente debatidas en las unidades básicas de organización que son los Círculos. Las hay que aluden a principios éticos, a derechos humanos, de tipo estructural, económicas, sociales…Basta registrarse y ya se puede emitir el voto.
Paralelamente, quien esté interesando ha podido inscribirse para estar presente en la Asamblea Ciudadana Sí se Puede que se celebrará durante este fin de semana en Vista Alegre Madrid y que constituye un punto de inflexión clave para el futuro que, en ausencia de palabra por inventar o adoptar, llamamos formación, movimiento…
Aunque a las cabezas más visibles de Podemos no les guste mucho,  a partir del 15 de noviembre podremos llamarles “partido” pues en eso se habrá convertido. O quizás, debiéramos decir un poco eufemísticamente que habrá un actor más para que pueda cumplirse lo que establece el artículo 23.1 de la Constitución: “Los ciudadanos tienen el derecho a participar en los asuntos públicos, directamente o por medio de representantes, libremente elegidos en elecciones periódicas por sufragio universal” No es mi intención debatir aquí sobre la democracia representativa pero tal vez convenga recordar en estos tiempos de apropiaciones (no solo de la bolsa y la hacienda ajenas) lo que nuestro Tribunal Constitucional ha precisado varias veces: que la titularidad del derecho de participación política corresponde en exclusiva a las personas físicas y no la ha reconocido ni siquiera a los partidos políticos a pesar de que estos sean considerados en el mencionado artículo "instrumentos fundamentales de la participación política". Su carácter instrumental coloca a los partidos no en la posición de usurpar la participación política individual sino en la de promoverla concurriendo a su formación y manifestación. Pero, ya digo, no quiero debatir esto ¿para qué si el Constitucional, esa institución a la que tantas veces se pone en un brete, lo ha dicho con claridad meridiana?
Cuando llegue esa fecha de noviembre habrá sucedido lo siguiente: tras el encuentro presencial del próximo fin de semana en Vista Alegre en el que se defenderán los borradores y resoluciones, se procederá a votarlos; habrá seguidamente una presentación de los más votados y de las candidaturas para ocupar los órganos de representación en el nivel estatal tal como queden configurados en las resoluciones adoptadas; el proceso finaliza con una nueva votación (como todas las demás abierta a todo el mundo que lo desee) en este caso de los candidatos.
¿Qué es lo que sabemos de todo esto por los medios de comunicación? Básicamente que en Podemos hay dos posiciones: la que representaría Pablo Iglesias y la que encabezaría Pablo Echenique. El Semanal Digital lo explicaba así hace unos días: “…los dos grupos se enfrentan por la concepción definitiva de Podemos aunque de cara al exterior quiten hierro a sus divergencias. Si los de Echenique piden, entre otras propuestas, una dirección colegiada con varios portavoces e incluso el sorteo de militantes para formar como miembros del futuro comité del partido, los de Iglesias abogan por la creación de una Secretaría General y listas abiertas para el Comité “  http://www.elsemanaldigital.com/pablo-iglesias-se-encuentra-con-el-primer-embate-serio-dentro-de-podemos-138013.htm
Como tampoco deseo entrar en semejante debate necesariamente intencionado, bastará con remitirme a las propuestas presentadas a la Asamblea bajo el rubro de “Principios Organizativos” Eso sí, quien tenga curiosidad deberá también tener paciencia puesto que no son dos, sino 98, de variada procedencia y sentido: http://propuestas.podemos.info/index.php/questions/principios-organizativos
Se comprende, no obstante, que ante semejante complejidad, ciertos medios tiendan a la simplificación, sin duda con el noble deseo de hacernos la vida más fácil a los ciudadanos. Y si inventan enfrentamientos más allá de una saludable confrontación es tan solo para poner un poco de sal en tan plúmbeas cuestiones como es una forma nueva de hacer las cosas…con la pereza que da eso.
¿Saben qué? Yo voy a participar en este proceso. Qué quieren, me hace ilusión que alguien me pregunte sobre las cosas que me incumben y que no solo me pida mi aval cada cuatro años después de engatusarme con promesas que probablemente incumplirá sistemáticamente. Igual es que se trata de eso, de ilusión, algo que ya no encuentro en lo que tenía hasta ahora…y mira que me esfuerzo.
Y a lo mejor me animo, oye. Puede que cuando llegue el momento de ir a las urnas entregue mi voto a quien consiga suscitar mi ilusión, no a quien pida que vuelva a creer en quien precisamente la defraudó por mucha historia que atesore y muchos méritos –me quito el sombrero…pero me lo vuelvo a poner porque no escampa- que en el pasado tuviera; es que esto último no le resuelve la vida a mi gente, ni su presente ni su futuro; y si no se la resuelve a ellos, naturalmente a mi tampoco.
Ah, ¿que podría favorecer con ello la instauración de una república bolivariana? ¿aquí? ¿en la vieja Europa? Hombre, no creo…pero, de todas maneras, pues ya si eso…¡chévere, amigos!

miércoles, 8 de octubre de 2014

Excalibur ¿un asunto menor?

¿Muerto el perro se acabó la rabia? Para nada, puede que este asunto no haya hecho más que empezar. Y no es en absoluto irrelevante.
Constatado: quien ordenó el sacrificio de Excalibur, el perro de la enfermera infectada de ébola, es de una imbecilidad difícilmente superable; a saber:
Ese animal ha convivido con sus dueños estando Teresa contagiada; y es de esperar que se comportara…como un perro, claro: tal vez lamió la mano de algún vecino que lo acarició; puede que intentara comerse la merienda de algún niño despistado en algún parque próximo a su domicilio; quizás orinó en este árbol o en aquella pared; acaso hizo sus deposiciones al lado de un columpio infantil o en las cercanías de un banco en el que acostumbran a reunirse jubilados para tomar el sol, o en los terrenos en donde juegan a la petanca.
Nada de eso lo sabremos ya, porque ignoramos si el animal estaba infectado o no. Las autoridades (¿autoridades?) del ramo decidieron que ante el riesgo potencial de que el perro estuviera enfermo, era preferible matarlo sin averiguar nada más; ni siquiera después de muerto han analizado nada y, ya incinerado, eso tampoco será posible. Hay a mi juicio aquí actuaciones negligentes que atentan contra la salud pública, justo lo contrario de lo que, presuntamente, se pretendía evitar.
¿No es estúpido? Sí, sí lo es. Y, esta presunta, drástica, medida de seguridad, es además absurda porque como han explicado hasta la saciedad especialistas como Thomas Frieden, director de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, o Juan José Badiola, presidente del Consejo General de Veterinarios de España, entre otros, no está en absoluto acreditado que los perros puedan ser transmisores del ébola a los humanos. De manera que, también, quienes han dado la orden del sacrificio han infligido un dolor adicional a Teresa y a su marido seguramente innecesario. 
Y además de este desprecio por quienes son los verdaderos sufridores de esta historia (aunque el miserable del consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid trate de extender sospechas sobre si Teresa mintió a los médicos que la atendieron) hay a mi modo de ver abuso de poder sobre ellos y su mascota y no sé si daño a la propiedad, pues manifestaron reiteradamente que no deseaban la muerte del animal sino que fuera aislado y analizado antes de tomar, en su caso, la decisión definitiva...hasta nombraron un tutor al que de nuevo las autoridades (¿autoridades?) sanitarias no han hecho caso aunque se haya desgañitado en los medios informativos en defensa del animal...y del sentido común.
Y, finalmente, ¿qué podemos decir del juez que sancionó positivamente la orden de sacar a Excalibur del domicilio familiar y sacrificarlo? ¿tenía los elementos de juicio necesarios? ¿ignoraba las dudas de la comunidad científica? ¿no hubiera sido más de razón y precisamente, que ordenara el aislamiento del animal, una investigación sobre los usos y costumbres de sus dueños con él en esos días clave y los análisis pertinentes para, a la luz de es información, decidir en justicia?
Francamente, nada me sorprendería que en cualquier momento algún colectivo de defensa de los animales plateara un rosario de querellas: por negligencia de las autoridades con riesgo para la salud pública, por robo y hasta por prevaricación. ¿No debería verlo de oficio el fiscal?

domingo, 5 de octubre de 2014

Ya tardan las expulsiones

Sánchez se pone digno y dice que expulsará del PSOE a los que usaron las tarjetas black de Caja Madrid. Pues ya está tardando; es que cuando la mierda empieza a oler mal, no para.
Estoy seguro, sin embargo, de que su lentitud no tiene que ver con que los encartados no son militantes de poco rango a los que les dijeron un día tu ponte allí y ya si eso con lo que haya.
No, igual es que no es fácil expulsar a Acosta (recuerden, los acostistas y el Hotel Suecia) Zapatero (Virgilio: todo un rector magnífico) Espinar (un muñidor tras las bambalinas durante años y años) De la Riva (chico de moda un tiempo e influyente ex concejal del Ayuntamiento de la capital) Arteta (ex alcalde de Móstoles que tal vez podría ilustrar a la parroquia –junto con sus opositores municipales de la época- si lo del 3% pasaba solo en Cataluña)…
Pero no me parece que esa sea la razón, ya digo. Creo más bien que tendrá que ver con el honesto deseo de hallar evidencias sobre si la pasta sustraída lo fue para destinarla a asuntos turbios (no sé, putas –con perdón de las meretrices-, francachelas, cursos de los niños en Canadá,  y esas cosas) o si, por el contrario, se empleó…se empleó para…se emp….¿para qué coño pudo haberse empleado?
A ver, Sánchez: que son conocidas como tarjetas black, no sé si mesentiende: vamos, que no hace falta esperar a saber si se defraudó a la Hacienda pública, que de eso ya se ocupará el fiscal llegado el caso; que no vale con devolver el dinerín…que eso es lo menos que se debe hacer cuando te han pillao con el carrito del helao o de pronto te ha entrado un ataque de dignidad en lo más íntimo de una conciencia sobrevenida.
Hay que sacarlos del partido ya, o sea, mañana mejor que pasado y la razón es el solo uso de esas tarjetas opacas, sin más, sin matices, si  circunloquios. Es que todo el mundo sabe de dónde sale el dinero que hay en las cajas de los bancos, el que sacamos para ir al Mercadona, pagar la luz o el agua, pasar una semana en Cullera…: de los depositantes (incluidos los estafados con las preferentes) o del Estado cuando los rescatan como es el caso, es decir, de mi bolsillo y del bolsillo de usted, sí, de usted también Sánchez.
¿Y los del PP? Y a mí que me importan los del PP en donde el trinque es consustancial, o sea; ¿le vamos a pedir comportamiento ético al neoliberalismo? Hombre…que no está el horno para bollos. ¿Que a la izquierda siempre se le exige un plus de moralidad? Claro ¿les parece raro que así sea?